¡Oh Wiracocha, divino resplandor del universo!
Creador de la luz,
Ungido para guiar a los hombres;
Como está escrito, en las antiguas leyendas
Tu voz reside en nuestro interior,
Padre verdadero al cual veneramos.
¿Dónde empieza tu estela?
¿Dónde se encuentra tu origen y final?
Tú vives en el celaje azul de los cielos,
Y descansas dentro de la profundidad de las cavernas,
Estas en todas partes como el agua
¿Tu poder reside en esa eternidad?
Escúchame venerable dios,
Donde te encuentres,
Así esté andando como un pequeña gusano
Detén tu mirada hacia mí,
Pues yo no puedo ver tu destellante rostro
Mis ojos no tienen la fuerza para contemplarte,
Así deseara no puedo verte,
Mi visión es débil.
Tú solo apareces ante mí
Cuando cierros mis parpados,
Dentro de mi cuerpo estas,
Pues tú conoces
Mi estirpe inka,
Tú siempre oyes lo que digo,
Escuchas en silencio,
En lo oculto, todo lo que hago.
Tu presencia es omnipresente
Como el fuego eterno,
Dispones de todo poder
Para que el fluir del mar continué.
Creaste al astro sol
Para hacer las auroras,
A la luna
Como recipiente de estrellas y luceros
Para que en las noches oscuras
Nos alumbre como madre.
¡Oh divino Wiracocha hacedor del cosmos!
Bajo cuyo mandato nos encontramos,
Cumplimos tus leyes
Y solo a ti te veneramos,
En esta tierra vivimos
Solo por el camino que nos has señalado
Ida y vuelta lo estamos recorriendo
Sin quebrantar en modo alguno tus designios.
En este valle estamos
Desde nuestro nacimiento sagrado
Y aquí permaneceremos
Hasta volver a la madre tierra.
Exquisito.
Gracias Dominicana en Miami pro compartir una especie de pausa, que baila.
“Creaste al astro sol
Para hacer las auroras,
A la luna”…esto es una delicia!!!
Hermoso! 🙂