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©Por Glenda Galán

Rey Andújar, poeta, narrador y performero dominicano. Nacido en Santo Domingo en 1977, Rey ha cosechado importantes premios a través de sus obras, a los que ahora se suma el premio del VI Concurso Latinoamericano y Caribeño de Novela Alba Narrativa 2015, con su novela Los gestos inútiles; razón por la que nos alegramos y conversamos con él, que amablemente nos comenta sobre este libro y sobre el galardón que ha merecido entre las 178 obras participantes de 18 paises de la región.

•Rey, ¿Cómo nace la trama de Los gestos inútiles?

Al terminar Candela me quedé con el deseo de escribir otro policiaco, pero estaban pasando muchas cosas dentro y fuera de mi literatura, y se me había muerto el personaje que hacía de detective, Petafunte. Luego de un tiempo encontré la trama adecuada: el supuesto suicidio de Daniel Beltrán… hay dos líneas muy fuertes en la novela, una que cuestiona el encubrimiento de esta muerte por un alto mando militar y la otra, la dejadez del único familiar de la víctima en que se resuelva el caso, y lo que pretenden hacer con el cuerpo del muerto. Todo está enmarcado en un ámbito socio-histórico que se ocupa de las transiciones del poder político y económico en RD, sobre todo, un momento de nuestra historia reciente: la llegada del Nintendo a las tiendas dominicanas y el paso de mando de Balaguer al PLD, que tiene mucho que ver con nuestro desastre actual.

• Háblame de los dialogos que contiene esta novela, los cuales fueron elogiados por los jurados de este importante concurso. ¿Qué los hace tan especiales?

Tengo entrenamiento teatral y pienso mucho en las conversaciones que tienen los personajes de las historias. Quizás lo que los hace especiales es la sencillez y el hecho de que los pongo a contradecirse mucho, y en esas dudas y contradicciones es que la historia avanza. Además, yo entro tarde a las escenas y salgo temprano de ellas, lo que hace que el diálogo sea dinámico. Hay algo muy logrado también y es la cotidianidad y el sabor del habla del día a día. Hay que tener cuidado con eso porque siento que hay escritores que quieren ser realistas y sacrifican el lenguaje con tal de parecer “del pueblo” y creo que eso es un disparate. El mejor diálogo es el que le sirve al universo de la historia, y una buena historia presenta siempre su propio lenguaje. El asunto, para mi escritura, está en escuchar y dejar esa maldita intervención del autor.

•Sobre el personaje principal de esta novela Jonás Marthan, ¿podría decirse que es un dominicano que entra en conflicto al volver a su país y enfrentar las realidades que dejó cuando se radicó en Barcelona?

Jonás Marthan es un tipo especial pero no lo sabe, está muy concentrado en manejar su sentido de culpa. Creo que el personaje funciona porque, aunque está en medio de una tragedia terrible e irrecuperable, él siempre presenta o pretende un aire de control, y es quizás esta contradicción lo que lo mantiene vivo e interesante a través del relato. Me cuidé mucho de no mostrar emociones obvias ante la muerte, que se ocupara de otras cosas. En cuanto a los conflictos, creo que le molesta más tener que dejar una aventura amorosa en Barcelona y sus rutinas para venir a Santo Domingo. El demuestra que los caribeños viajamos poco por placer y en nuestros traslados hay siempre algo de probabilidad o lo posible de lo imposible.

• El personae principal de esta novela viaja a Santo Domingo a ocuparse de un asunto funerario, ¿es un paralelismo en esta historia el hecho de enfrentarse a la muerte y a lo se deja atrás cuando te vas del país donde naciste?

Uno no se va nunca, nunca. Lo funerario lo usé como una fuerza mayor para traerlo al Caribe… porque conocí a Marthan en Barcelona, pero no conozco suficiente esa ciudad, aunque he estado ya varias veces, como para escribir el fuerte de la novela allá. Como escritor mi trabajo se basa en la toma de decisiones. Para qué forzarme y escribirla en Barcelona si podía usar el Caribe que conozco? Pues por eso tomé la decisión de que vinieran a Santo Domingo desde Puerto Rico, Barcelona, Nueva York, etc, para bregar con el cuerpo de Daniel Beltrán.

•¿Recuerdas alguna anécdota que puedas compartir relacionada a la creación de esta novela?

Utilicé personajes de Candela que creí no haber desarrollado a gusto, que no habían contado su historia completa. En esta novela, se roban el show Lubrini y el forense alemán Gideon Isslet. Hay elementos de Candela en ella y sin embargo, ambas novelas pueden ser leídas sin apoyarse una de la otra, lo cual era un reto que me había propuesto. Mi teniente nuevo, ya que el otro se me murió, se llama Rojo Agramante. Hay mujeres, pasiones, y amores. Me dio mucho gusto escribirla. Traje las maquetas de Puerto Rico a Chicago y en el invierno de Chicago armé el muñeco. Escribía de cuatro a ocho de la mañana, todos los días, siempre escuchando el mismo playlist, que era, entre otras cosas, Maelo, the Black Keys, Caetano Veloso y Fernando Villalona. Es interesante que ahora, al escuchar cierta canción de uno de estos artistas, yo puedo remontarme a tal o cual escena… o recordar momentos luminosos en donde pude desarrollar una idea y salir de un problema. Siempre metido en problemas y saliendo de ellos, así avanza el relato.

•¿Cómo te enteraste de que Los gestos inútiles había ganado el premio?

Estaba durmiendo la siesta con mi hija Maya, porque había trabajado el turno calavera en el hotel la noche anterior. Cuando nos despertamos vimos el celular con un montón de llamadas perdidas de números extraños. Le pregunté a mi esposa por la fecha y me acordé de que el premio lo daban ese día. Salí a buscar la comida que habíamos ordenado para la cena y en el coche revisé los mensajes: uno era de una agencia de noticias cubana, otra agencia de noticias venezolana y otro del Comisionado de Cultura en NYC, el Lic. Carlos Sánchez, quien estaba como invitado de la Feria de la Habana con otro escritor galardonado, José Acosta, quien recién recibió el Casa de las Américas por una novela publicada en los Estados Unidos. El mismo José luego lo puso por Facebook y lo hizo oficial.

•¿Qué cambios percibes en ti como escritor desde la publicación de El hombre triángulo y Candela, hasta este nuevo libro que gana este importante galardón?

Mi lenguaje se ha enriquecido, y el lenguaje es la herramienta del trabajo que hago. Sin embargo, consigo más materiales para trabajar y me hago más humilde ante el proceso y todo lo demás… humildad en un buen sentido, ya que uno tiene que olvidarse de uno y pensar en el texto, en lo que sea significativo para el mismo. También quiero creer que soy un tanto más paciente que antes… la literatura es una escuela de paciencia. Sigo aprendiendo lo difícil que es componer un libro y publicarlo. Los gestos inútiles fue rechazada por varias editoriales y hubo algunas que ni siquiera me respondieron. Y sin embargo con cada rechazo, yo fui puliendo mi proyecto. Estos cuatro años fueron muy provechosos para mí, para mi laboratorio de escritura.

•¿En qué trabajas ahora en el plano literario?

Recién acaba de salir mi tesis doctoral en forma de libro, Formas del ascenso: estructura mitológica en Escalera para Electra de Aída Cartagena Portalatín… comienzo ahora con el tour de lecturas de ese texto. Aunque estuve en RD hace poco invitado por el Centro Cultural de España y allí leí la conferencia correspondiente, “La constelación Aída”, es en marzo cuando arranca todo: en Puerto Rico estaré en varias librerías y el Congreso Latinoamericano de la Universidad de PR en Arecibo, luego en abril, se presentará oficialmente el libro en la Universidad Apec. En el mismo abril lo presento en Kentucky y Notre Dame.

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Rey Andújar (Santo Domingo, 1977.) Ha publicado la novela corta El hombre triángulo (2005), la novela Candela (Alfaguara, 2007),  las colecciones de cuentos El factor carne (2005) Amoricidio (Premio Nacional de Cuentos Feria del Libro 2007) Ugdu(2012), Saturnalia (2013), . Ha ganado diversos certámenes como el Premio de Cuento del Banco Cental, el Premio Internacional de Cuento de Casa de Teatro, el Premio de Cuento de la Alianza Cibaeña, el Premio literario Letras de Ultramar y el  VI Concurso Latinoamericano y Caribeño e Novela Alba Narrativa 2015.