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Este año aprendí muhcas cosas, quizás porque hice consciencia de ese proceso aleccionador que cada año ocurre en nuestras vidas, pero que en mi caso ha pasado si pena ni gloria en otras etapas de mi vida. 2013 fue un maestro como ninguno, este es parte de su legado en mi.

• Este año aprendí el valor del perdón. Entendí que perdonar es la forma más difícil de sanación, pero la más profunda, pues llega hasta el alma. Evadir es solo un parcho que infecta la herida abierta.

• Aprendí que el verdadero amor nunca termina, aunque se transforme, que los seres humanos somos cambiantes y no podemos a ferrarnos a sentir igual toda la vida por los demás, pero que cada beso que entregas deja una huella en la vida de quienes reciben ese regalo, que sin darse cuenta los hace más felices y seguros de ellos mismo.

• Que decir te amo no es vergonzoso, al contrario es la frase que necesita más valentía para ser pronunciada por que en ella lo entregas todo y expones el corazón.

• Aprendí de nuevo a ser mamá al tener la dicha de compartir más tiempo con mis hijos justo cuando se transforman en adolescentes, creo que este ha sido el mayor regalo que la vida me ha dado en este año, esa posibilidad de haber estado más tiempo con ellos en esta etapa de sus vidas que marca el inicio de nuestra relación como adultos.

• Aprendí a decir no. Algo que era muy difícil para mí.

• Aprendí que el agua no se mezcla con el aceite, cuando los valores no son iguales o parecidos, las relaciones no prosperan.

• Aprendí a alejarme de gente tóxica, porque la única loca que tengo capacidad de sobrellevar es a mi misma, ya conmigo basta!

• Aprendí que las heridas van sanando, que solo es cuestión de tiempo volver a sonreír cuando alguien te ha lastimado.

• Aprendí que para mucha gente las redes sociales son el mundo, y que viven sus vidas a través de ellas…Algo que me dio pánico, por lo que me dediqué a vivir más en el mundo real.

• Aprendí a borrar de facebook a los hombres que me enamoran mandándome poemas, y a quedarme con los poemas para disfrutarlos 🙂

• Aprendí que nadie aprende en cabeza ajena.

• Aprendí a seguir dando a pesar del dolor que pude sentir, porque nadie me va a dañar la capacidad de amar con su desamor.

• Aprendí que el desamor es un virus que intenta arropar el corazón de amantes y  amigos y que la mejor cura para este mal es la distancia.

• Aprendí que no existe el fracaso, que detrás de un tropezón siempre se esconde una maravillosa sorpresa, que solo puedes ver si te levantas y sigues tu camino.

• Aprendí a bajar la marcha, a disfrutar más cada momento.

• Aprendí que mi paso por la vida de muchas personas ha sido material de construcción y me sentí muy feliz de  dejar algo positivo en el camino.

• Aprendí que la tristeza no es el mood común de una persona, que el cerebro se acostumbra a veces a estar triste, pero que hay que luchar por reeducarlo en la felicidad.

• Aprendí a escribir todos los días.

• Aprendí que la juventud es eterna aunque duelan los huesos.

• Aprendí que amo los zapatos rojos.

• Aprendí que la envidia no puede tocarte cuando has construido un camino vertical hacia la bondad.

• Aprendí cuán miserable son los hombres que odian a su propia gente.

• Aprendí que la patria es un nombre y que yo soy la isla.

• Aprendí que nada puede ser más importante en este mundo que el bienestar de las personas y el respeto a los semejantes.

• Aprendí que no quiero ser hispana, norteamericana ni dominicana, quiero ser un ser humano, sin tener que elegir partes y mutilar otras, quiero ser Glenda Galán.

• Aprendí que hacer ejercicios me hace feliz.

• Aprendí que nada es eterno y que lo mejor no está por llegar, es ahora.

• Aprendí que aún no se nada!