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GG
Hoy amanecí con unas ricas tostadas, un cafecito y un libro de mi hijo traídos a la cama.
Hate that Cat, el libro que con tanto amor me prestó mi hijo, me hizo recordar la fascinación que han sentido algunos escritores por los felinos.
Creo que la personalidad reservada de estos animales es fundamental en la relación felino-escritor, y por su actitud de libertad suprema, es por lo que seguramente los escritores los eligen como acompañantes en sus largas horas dedicadas a la escritura.
Escritores
Entre los escritores amantes de los gatos se encuentran:
H. G. Wells, Tennessee Williams, Charlotte & Emily Brontë , Alejandro Dumas, Mark Twain, Lord Byron, Edgar Allen Poe, Victor Hugo, Ernest Hemingway, F. Scott Fitzgerald.
También  Charles Dickens tuvo una gata llamada William a la que rebautizó con el nombre de Williamina,cuando se dio cuenta que era gata y tuvo una camada de gatitos, de los cuales se quedó con
Master’s Cat.
Otros de los escritores que se suman a la lista de amantes de los felinos son ColetteT. S. ElliotWalter Scottt,  Julio Cortazar, quien tuvo un gato llamado Teodoro ; W. AdornoJorge Luis Borges, quien vivió junto a sus dos gatos, Odín y  Beppo, llamado así en honor a un personaje de Lord Byron (quien también tenía un gato con dicho nombre).
Poemas de Borges a los gatos:
Borges y gato
A un gato
Jorge Luis Borges
No son más silenciosos los espejos
ni más furtiva el alba aventurera;
eres, bajo la luna, esa pantera
que nos es dado divisar de lejos.
Por obra indescifrable de un decreto
divino, te buscamos vanamente;
más remoto que el Ganges y el poniente,
tuya es la soledad, tuyo el secreto.
Tu lomo condesciende a la morosa
caricia de mi mano. Has admitido,
desde esa eternidad que ya es olvido,
el amor de la mano recelosa.
En otro tiempo estás. Eres el dueño
de un ámbito cerrado como un sueño.

A su adorado Beppo, Borges le dedicó estos versos incluidos en su obra ‘La cifra’ de 1981:

BEPPO

El gato blanco y célibe se mira
en la lúcida luna del espejo
y no puede saber que esa blancura
y esos ojos de oro que no ha visto
nunca en la casa son su propia imagen.
¿Quién le dirá que el otro que lo observa
es apenas un sueño del espejo?
Me digo que esos gatos armoniosos
el de cristal y el de caliente sangre,
son simulacros que concede el tiempo
un arquetipo eterno. Así lo afirma,
sombra también, Plotino en las Ennéadas.
¿De qué Adán anterior al paraíso,
de qué divinidad indescifrable
somos los hombres un espejo roto?