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Los dominicanos celebramos esta semana el mes de la herencia hispana con una lectura de escritores residentes en el sur de la Florida.

La actividad que se llevará a cabo en el Consulado General de la República Dominicana en Miami  es un pretexto para fomentar el compartir de los dominicanos residentes en el sur de la Florida con otras nacionalidades de Hispanoamérica con quienes comparten territorio.

Miami es eso, una mezcla de idioma español, porque de que uno aveces no se entiende, no se entiende con los residentes de otras nacionalidades, aún proviniendo e países hispanos.

Por ejemplo cuando un mexicano dice ahorita, es diferente al ahorita del dominicano, la falda que usan las mujeres en algunos países en Hispanoamérica, es en Cuba la salla y el carmelita de los cubanos es el marrón de otros países, por solo dar algunos ejemplos.

Miami es también una coexistencia entre personas con diversas formas de ver el mundo, una confluencia de  artistas, que hacen de esta ciudad un lugar más agradable y creativo.

Podría decirse en buen dominicano, que Miami es un sancocho de hispanos donde cada uno enriquece este caldo de ciudad, con su manera de ser, su trabajo y su arte.

Por eso, qué mejor forma de terminar esa noche de lecturas con los escritores José Tobías Beato, Rafael Martorell y con una servidora que con un rico sancochito dominicano para celebrar la herencia que nos une?

Glenda Galán.