¡Mamma mía! fue lo que dije cuando me topé con el booth de la fundación Beyeler que contiene la instalación de los artistas italianos Pierpaolo Ferrari y Maurizio Cattelan, “Papel higiénico”(Toilet Paper).
Esta instalación interactiva, en la que el público puede manipular los utensilios y muebles de un apartamento ficticio de la ciudad de Nueva York, cuenta con varias habitaciones empapeladas de pop corn que flota en el cielo, simulando estrellas, de peces que nadan entre nubes, así como también de un baño y comedor empapelado e inundado de espagueti. El montaje contiene varias lápidas esparcidas por todo el entorno, así como alfombras que contrastan con las rebosantes escenas, en las que cientos de visitantes se tomaron fotos para Instagram, Facebook o Tweeter.
Los elementos, que han sido extraídos de esta instalación han sido extraídos de la obra de Cattellan, se yuxtaponen a motivos explorados por papel higiénico, logrando una escena fantástica, donde puedes encontrar una gallina sobre la mesa del comedor, un cocodrilo con la boca llena de espaguetti o un secador de pelo en una esquina de la habitación.
Tuve la suerte de visitar dos veces esta instalación, y lo digo pues en la primera ocasión pude explorarla a detalle, ya que, a pesar de ser la más visitada la noche VIP, por lo menos quedaba espacio para caminar. La segunda vez que pasé por allí, era casi imposible circular dentro del booth y las personas se aglomeraban para ver cada objeto y fotografiarse en cualquiera de sus ángulos. Sin lugar a duda esta ha sido la instalación más fotografiada este año en Art Basel.
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