La realidad y la ficción aveces se unen en las vidas de los creadores, hay varios casos de escritores asesinos o plumas que matan…

Jack Unterweger

este escritor  austriaco fue condenado en  1974, por el asesinato de varias mujeres. Estando en la cárcel escribió numerosas novelas que lo hicieron conocido.

En 1990, Unterweger fue liberado y años después, en Los Ángeles, fue contratado para escribir un libro sobre un asesinato de prostitutas. Estando en Estados Unidos, el escritor asesinó a varias mujeres más. en 1994 fue condenado a cadena perpetua, pero ese mismo días se ahorcó.

 Krystian Bala

a finales del año 2000 un cuerpo fue encontrado flotando en las aguas del río Oder en Polonia, pero el caso fue archivado por falta de pistas. Tres años más tarde Bala publicó su libro  “Amok” , en el que narró un asesinato que guardaba numerosas similitudes con el del 2000.

La policía investigó el caso y el escritor fue detenido,  pero fue liberado unos días después al no encontrarle pruebas suficientes de haber cometido el crimen. Luego se descubrió que Bala había vendido un celular muy parecido al de la víctima y que este era un conocido de la ex esposa del escritor. Aunque hasta el día de hoy sigue en prisión, él se declara inocente.

Louis Althusser

Uno de los filósofos más reconocidos del siglo XX, quien estranguló  a su esposa en 1980 y luego fue recluido en un centro psiquiátrico, pues se comprobó su trastorno mental sufrido como consecuencia de su participación en la Segunda Guerra Mundial.

Vlado Tavenski

Periodista macedonio que publicó un libro sobre el asesinato de tres meretrices. La policía descubrió que en el libro existía información que solo un asesino podía conocer. En el 2008, Tavenski fue culpado de asesinato y poco después se suicidó.

William Burroughs

A este escritor  excéntrico  de la generación Beat estadounidense se le ocurrió en 1951 imitar la hazaña de Guillermo Tell, colocándole a su esposa una manzana en la cabeza, para dispararla con una pistola. .. el final de  este invento ya puede imaginarlo!