Adela

Nacer hombre

Cuánto trabajo ella pasa
por corregir la torpeza
de su esposo, y en la casa,
(permitidme que me asombre)
tan inepto como fatuo
sigue él siendo la cabeza,
porque es hombre.

Si alguna versos escribe
-“De alguno esos versos son
que ella sólo los suscribe”;
(permitidme que me asombre)
Si ese alguno no es poeta
¿por qué tal suposición?
-Porque es hombre.

Una mujer superior
en elecciones no vota,
y vota el pillo peor;
(permitidme que me asombre)
con sólo saber firmar
puede votar un idiota,
porque es hombre.

Él se abate y bebe o juega
en un revés de la suerte;
ella sufre, lucha y ruega;
(Permitidme que me asombre).

Ella se llama “ser débil”,
y él se apellida “ser fuerte”
porque es hombre.

Ella debe perdonar
si su esposo le es infiel;
mas, él se puede vengar;
(permitidme que me asombre)
en un caso semejante
hasta puede matar él,
porque es hombre.

¡Oh, mortal!
¡Oh mortal privilegiado,
que de perfecto y cabal
gozas seguro renombre!
para ello ¿qué te ha bastado?
Nacer hombre.

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Adela en dos etapas de su vida, joven y mayor cargando a sus sobrinos nietos.

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Más a menudo de lo que se cree, nace una persona dispuesta a derribar las barreras de la ignorancia.

Adela Zumudio es una de esas mujeres que además de ser poeta es inspiración para quienes creen que lo imposible se derriba con la perseverancia. Esta  escritora Boliviana, nació en Cochabamba el 11 de octubre de 1854, cuando las leyes solo le permitieron estudiar hasta tercer grado, pero Adela continuó instruyéndose por su cuenta.

Tuvo que enfrentarse a una sociedad machista y cerrada, que valoraba el matrimonio y el rol esclavista de ama de casa por sobre la educación y la libertad de pensamiento. A pesar de las trabas que fueron surgiendo en su entorno por ser mujer, nada la detuvo en el aspecto profesional, además de sus cargos como profesora y directora, fundó su propio y homónimo Liceo de Señoritas.

En 1925 fue coronada como el más elevado exponente de la cultura de su país.

Su obra abarcó el teatro, los cuentos y los ensayos, siempre con una profunda mirada social, adelantada a su tiempo. Los temas que llaman su atención son la vida, la naturaleza, los sentimientos y la preocupación filosófica. 

Sus cuentos reflejan el ambiente de su época y denuncian la injusticia social y económica con sutileza, medida e ironía. El desconsuelo que se encierra en muchas de Las composiciones de Zamudio, nace de la angustia filosófica, de la lucha con un medio  hipócrita y  opuesto al desarrollo de las mujeres, que ella supo combatir desde el intelecto, sin que esta actitud menoscabara su femineidad.

 “Nacer Hombre”, es un poema que sin duda nos permite adentrarnos un poco en el pensamiento de esta indomable escritora, que a pesar de su alto sentido cristiano fue combatida por las autoridades eclesiásticas, hasta suscitar una célebre polémica nacional, en la que casi la totalidad de los escritores bolivianos importantes se solidarizaron con con ella.

Maestra, poetiza, autora de piezas de teatro y lecciones líricas para niños. Su labor didáctica aparte del magisterio, cuenta con estudios y conferencias orientadoras. 

Sus obras comprenden los siguientes títulos: “Ensayos políticos, Buenos Aires 1887; “Intimas”, “Peregrinando”,”Ráfagas”, París 1914; “Cuentos breves”. 

Fallece en 1928, en su tierra natal, Cochabamba.